Este programa informático con el nombre de EarthViewer 3D y creado por Keyhole Inc., pionera en el desarrollo de software especializado en aplicaciones de visualización de datos geoespaciales, ha sido fundamental en estas dos últimas décadas, para el trabajo de arqueólogos, historiadores, geógrafos, y otros expertos, dedicados al estudio del planeta, y es que, a través de cartografía, basada en imágenes satelitales se han podido ubicar los sitios más recónditos.
Un ejemplo es el hallazgo de los fósiles de una mujer y un niño, en Johannesburgo, Sudáfrica, en 2008, cuya antigüedad fue calculada en aproximadamente 2 millones de años, llevó a los investigadores a suponer que se trataba de una nueva especie de homínido intermediario entre Australopithecus y el Homo habilis.
El hecho fue protagonizado por el científico Lee Berger, de la Universidad de Witwatersrand, y fue presentado en la revista Science, en abril de 2010, luego de un detallado análisis.
Otra importante revelación fue la de los geoglifos con efigies en forma de animales, que datan de hace 4 mil años, encontrados en 2012, en las llanuras costeras de Perú. La investigación, dirigida por Robert Benfer, antropólogo y profesor emérito de la Universidad de Missouri, en 2012, cambió la concepción de la prehistoria del Perú, ya que los geoglifos podrían representar una especie de calendario, pues se encontraron orientaciones astronómicas en cada montículo.
Un caso más, fue el bosque del Monte Mabu, una montaña al norte de Mozambique, que alberca una selva tropical primaria, y que, a unos mil 700 metros de altura, con un bosque de 7 mil hectáreas, era desconocido hasta antes de 2005 y visitado sólo por pobladores locales. Fueron los científicos del Real Jardín Botánico de Kew, en Inglaterra, quienes explorando la vista de Google Earth en la búsqueda de vida salvaje en el continente africano, lo hallaron, de ahí que también sea conocido como el “Bosque Google”. En esta reserva, encontraron árboles de hasta 45 metros de altura y nuevas especies de flora y fauna.
Otro descubrimiento más, es el de dos estructuras separadas por al menos 130 kilómetros entre sí, ubicadas en la cuenca del río Nilo, al sur de El Cairo, las cuales fueron halladas en 2011, por la arqueóloga norteamericana Angela Micol, quien supuso que se trataba de pirámides egipcias desconocidas. Como respuesta, Micol recibió una negación por parte de otros expertos, sin embargo, tiempo después estudios de la región y algunos mapas antiguos soportaron el encuentro.
Uno de los montículos supera tres veces en tamaño a la Gran Pirámide de Guiza y, al parecer, posee una parte superior plana y una formación simétrica que luce erosionada. La segunda estructura, cerca del Oasis de Fayum, y a 1.5 kilómetros al sureste de la ciudad de Dimai, tiene cuatro lados de 140 pies de ancho. El color de estos monumentos es oscuro y semejante al material de las paredes de esta ciudad, construidas de adobe y piedra.
En 2014, Ido Watchel, estudiante de la Universidad Hebrea de Jerusalén, descubrió a aproximadamente 13 kilómetros al noroeste de la mar de Galilea, un monumento de piedra en forma de media luna con una antigüedad de 5 mil años. La estructura posee 150 metros de longitud y un volumen de 14 mil metros cúbicos. Además, las piezas de cerámica excavadas en su entorno, revelan que su creación pudo darse entre el año 3050 y 2650 antes de Cristo.
Watchel expuso en su momento, que la forma de media luna podría corresponder a un símbolo de la antigua Mesopotamia, que hace referencia a Sin o Sinai, dios de la Luna.
Cabe señalar que Keyhole Inc., fue adquirida por Google en 2004, y la primera versión de Google Earth fue lanzada un año después. Para 2013, ya gozaba de gran popularidad para visualizar cartografías, pues había alcanzado mil millones de descargas. Hoy día, se divide en dos versiones de pago y una gratuita, que son compatibles con diferentes sistemas operativos. Asimismo, la integración de Google Street View ha permitido la visualización de árboles en tres dimensiones en algunos países, además de monumentos históricos, entre otras precisiones que le dan mayor realismo; entre sus herramientas, ofrecen un simulador de vuelo, el cual es útil como un recurso pedagógico.
Commentaires