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El 25 de junio de 2009, Michael Joseph Jackson, mejor conocido como Michael Jackson, murió de un paro cardíaco, en Los Ángeles, California, a la edad de 50 años. Según las investigaciones, el deceso se debió a un cóctel mortal de sedantes, principalmente, propofol, que le administró su médico, Conrad Murray.
Siempre, en el centro de atención, el llamado rey del pop fue una estrella del entretenimiento, cuya carrera cautivó al público y obtuvo fieles seguidores en todo el mundo. Revolucionario, innovador, talentoso y prodigio son parte de las cualidades que le hicieron destacar.
A pesar de los escándalos que suscitó durante toda su carrera, su faceta musical inspiró a muchos artistas. Con más 350 millones de discos vendidos en todo el mundo, Jackson se convirtió en un referente de música para varias generaciones.
El cantante logró varios hitos por los que será recordado, por ejemplo, su videoclip de Billie Jean, que se convirtió en el primer video de un artista negro en retransmitirse por el canal MTV; y gracias al videoclip Thriller, el audiovisual más largo e innovador de la época, se inauguró la era de los videos con coreografía. Los expertos señalan que, con Michael Jackson, empezó “la era del videoclip”.